Mayor inclusión de estudiantes y representación territorial son algunos de los desafíos tras la jornada regional de SOMICH en La Araucanía.
La sociedad de Microbiología de Chile es una asociación científica que integra a profesionales de múltiples áreas, entre ellas la microbiología clínica, ambiental, industrial, agrícola, veterinaria y alimentaria. Los encuentros territoriales son parte del quehacer de la Sociedad, en esta oportunidad y por primera vez se reunieron en La Araucanía en una jornada que estuvo orientada a fortalecer la disciplina y potenciar la descentralización científica desde el sur del país.
La jornada contó con dos conferencias, la primera titulada “SOMICH: Desafíos y Oportunidades” donde se hizo hincapié en el escenario que representa la actualidad para la SOMICH, un momento marcado por importantes desafíos y múltiples oportunidades. Esta conferencia estuvo a cargo de la Dra. Julieta Orlando, actual presidenta de la Sociedad de Microbiología de Chile, quien revisó el papel de la sociedad en el fortalecimiento de la microbiología a nivel nacional y regional, su contribución a la formación de nuevas generaciones, la vinculación con la comunidad y las autoridades, y la necesidad de adaptarse a un mundo científico en permanente transformación. Además, se compartió los principales retos y oportunidades asociados a la colaboración interinstitucional, la proyección internacional y la incidencia en políticas públicas.
“Entre los desafíos tenemos por ejemplo hacer ajustes a nuestros estatutos porque nos interesa seguir creciendo, tener cobertura y representante ojalá de todos los territorios, y que esa expansión incluya a los y las estudiantes, entonces trabajaremos para que se sumen a la Sociedad a través de una categoría de socios específica para ellos, con todos los beneficios y oportunidades que eso incluye”, anticipó la Dra. Julieta Orlando.
La resistencia antimicrobiana (RAM) un problema que no distingue territorios
La microbiología tiene muchos aspectos desde los cuales se puede aplicar, algunos científicos desarrollan líneas de investigación en salud animal, otros en salud de humana, y otros en salud ambiental, frente a la RAM es fundamental que estos tres aspectos se crucen para entender cómo los microbiomas se mueven en estos tres ámbitos y tener un enfoque global e integral.
Esta temática también fue abordada durante la jornada a través de la conferencia “Ciudades inteligentes para enfrentar la dispersión de la resistencia a los antimicrobianos”, a cargo del Dr. Jorge Olivares donde se mostró y analizó cómo la RAM se ha convertido en uno de los principales desafíos de salud pública a nivel mundial. Tradicionalmente, se le ha abordado desde la perspectiva hospitalaria, pero este enfoque resulta limitado, ya que el problema trasciende las fronteras clínicas y se manifiesta en distintos niveles de organización social y ambiental, la buena noticia es que en ese sentido hay avances.
“En este minuto yo creo que el principal avance es precisamente entender este fenómeno más allá del hospital. Eso es fundamental, probablemente hasta hace 15 o 20 años el fenómeno estaba totalmente circunscrito a los hospitales y pensar que, por ejemplo, el 70% de los antibióticos se usa en producción animal no se usa principalmente en medicina humana, eso es fundamental. Entender que la resistencia se mueve, sale del hospital y que inclusive puede ser más peligrosa que salga del hospital que solo estudiar la allí”, explicó el Dr. Jorge Olivares.
“En este escenario el reto es frenar su dispersión en los espacios donde las personas conviven cotidianamente. Hoy una de las iniciativas que podemos destacar es el aumento del conocimiento genómico, por ejemplo, que cada hospital tenga su secuenciador y en tiempo real permite reconocer ciertos brotes bacterianos en el ámbito de resistencia es fundamental. Hacia eso tenemos que caminar. Se está logrando en algunos centros de salud en la zona central de Chile y eso yo creo que tenemos que replicarlo a nivel país”, enfatizó.
La resistencia de microorganismos no es un problema de Chile, si un clon de bacteria es exitoso, no solo aparece en Chile, aparece en Argentina, lo encontramos en Uruguay. Ya no hablemos solo de Chile, es un problema global. “¿Para qué sirve una sociedad científica?, para conectar a los científicos, para hacer diplomacia científica y que finalmente permita conectar al científico no solo en Chile, sino que en otros en otros países que son también súper fundamental en ese sentido. Una de las cosas que, por ejemplo, nos permite es la capacidad de conocer gente en otros países, sobre todo en nuestro ámbito iberoamericano. Por ejemplo, formamos la Red Latinoamericana de Vigilancia en Aguas Residuales, donde en muchos países se aunaron protocolos, criterios para finalmente hacer un aporte desde nuestra investigación”, destacó el Dr. Jorge Olivares.
Vinculación regional y proyección desde La Araucanía
La agenda en Temuco incluyó reuniones con autoridades académicas, sesiones de trabajo con investigadores locales y actividades de vinculación con la comunidad, entre ellas charlas para estudiantes de pregrado y visitas a establecimientos escolares. La presidenta de SOMICH anunció, además, iniciativas concretas para fomentar la participación estudiantil, como descuentos en congresos y una categoría de membresía específica para estudiantes. “Queremos que la microbiología sea una disciplina más inclusiva y representativa, que convoque a las nuevas generaciones y se proyecte con fuerza en el escenario internacional”, afirmó la Dra. Orlando.
El científico de Bioren UFRO y miembro del directorio de SOMICH, Dr. Patricio Barra, subrayó que la presencia de la sociedad en la región “no sólo visibiliza la relevancia de la microbiología, sino que abre la puerta a beneficios concretos para estudiantes y programas de posgrado, al facilitar redes de colaboración y nuevas oportunidades de integración”.
El Dr. Michel Abanto, investigador Bioren UFRO y Socio Somich, destacó que esta visita representa una oportunidad para la comunidad que hace microbiología desde la UFRO, “Es sumamente importante que hayamos recibido a la directiva de la SOMICH porque nos abre una hoja de ruta para nuevas oportunidades y actividades que podamos hacer en conjunto, no solamente dentro de aquí en la Universidad de la Frontera, sino también a nivel regional”, señaló y agregó, “La microbiología hoy se ha convertido en una herramienta transversal, va desde lo ambiental a lo clínico, pasando por lo biotecnológico. Esta jornada, fue una instancia para ver cómo convergemos en objetivos comunes y aportamos a la microbiología”, señaló.